4 ideas para promocionar nuestra empresa mal planteadas

Muchos negocios tecnológicos ya tienen su blog, su equipo de ventas o un perfil en Facebook. Herramientas de marketing que ayudan a vender. Pero ¿Saben utilizarlo? ¿Aportan realmente lo que los clientes necesitan? ¿Ayudan a vender más?

Para ver que no siempre es así, hemos querido reunir algunas propuestas tópicas pero que todavía no entienden muchas compañías o se utilizan mal dando lugar a pocos o ningún resultado. Utilizando un poco de originalidad y buenhacer pueden ayudarnos a remontar y conseguir que los clientes sigan estando a nuestro lado.

Equipos de venta

Podemos tener a varias personas dedicadas a la venta pero si sus objetivos, comunicación y acciones no son consecuentes con lo que la empresa ofrece, todo el trabajo será en balde. Es necesario mucho más que un comercial para vender.

Por ello, más que responsables de ventas, es necesario contar con un equipo de ventas integrado totalmente en la empresa y cada no solo de vender sino también de ayudar a los clientes en todo el proyecto y actuar como soporte técnico del mismo. Un profesional de confianza.

E-mail

Podemos ser un negocio eficaz en nuestro trabajo pero si no somos capaces de llegar a nuestros clientes, nada tendrá sentido. El correo electrónico es una buena opción para mantener atentos a nuestras noticias a los clientes y decir a los potenciales que todavía estamos vivos.

No se trata de estar todos los días enviando e-mails publicitarios sino dar mensajes claves en momentos concretos. Ofertas, promociones o simplemente hablando de lo que mejor sabemos. Y esto nos ayuda a ir directamente al siguiente punto: los contenidos.

Contenidos

Los blogs corporativos son una herramienta que ya utilizan muchas compañías. Sin embargo, debemos tener claro que son un lugar donde el autobombo y la publicidad no servirá para mucho ya que nadie se meterá en ellos.

Lo importante de los contenidos en un blog corporativo es darles una utilidad, un contenido de valor. Si somos vendedores de informática podemos utilizar el espacio para hablar sobre nuestra experiencia, contar las novedades de fabricantes o explicar cómo se pueden resolver pequeñas incidencias, por ejemplo.

Esta información se utilizan no solo para darnos imagen de marca sino también para demostrar nuestra experiencia en un ámbito concreto. Y esto es precisamente el gran valor que debemos darle para que sea interesante para nuestros clientes.

Unido al punto anterior, podemos utilizar estos contenidos para enviar a una newsletter periódico donde nuestros clientes estén al día de todo lo que pasa en el sector.

Redes sociales

En Facebook o Twitter no es lo mismo cantidad que calidad. Podemos tener 200.000 seguidores en nuestra página de Facebook que ninguno está interesado en nuestros productos, los mensajes caerán en saco roto. Por ello, siempre deberá primar el crecimiento natural.

Además, muchas empresas cuentan con perfiles en Twitter o Facebook totalmente abandonados. De poco sirve esto. Los usuarios esperan que este espacio sea un lugar activo. No solo de parte de la compañía sino también de los clientes que podrán hacer preguntas o resolver incidencias.

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