PSVita o Nintendo 3DS son dos consolas portátiles que están en el mercado con unos resultados muy lejos de lo esperado. Los propios responsables de Sony así lo admitían mientras en Nintendo se habla de las cifras de juegos vendidos obviando las unidades de dispositivos vendidos. ¿Están en crisis las consolas portátiles? ¿Han pasado de moda frente a la Xbox One o PlayStation 4 de turno?
Últimamente se habla mucho sobre Xbox One y PlayStation 4. Estos dos grandes consolas han eclipsado todas las noticias alrededor de dispositivos de entretenimiento que, aún llevando mucho más tiempo de comercialización, se han llevado muchos menos titulares. De hecho, las grandes afortunadas en marketing y ventas durante estas navidades han sido estos modelos que también llegaban a un mercado expectante.
El auge de videojuegos en smartphones y tablets tampoco han ayudado a las consolas portátiles. La explosión de oferta de entretenimiento en tiendas de aplicaciones ha relegado a un segundo plano la necesidad de contar con un dispositivo de bolsillo solo para jugar. Tanto es así que ni los fabricantes ni los consumidores están apoyando estos dispositivos que tienen a quedarse en las estanterías de las tiendas frente al frenesí que producen la movilidad de consumo.
Lo explica claramente Fergal Gara, responsable de la división PlayStation en Sony UK en una entrevista para VG 24/7:
«Los juegos en smartphones y tablets han cambiado las reglas del sector. Los usuarios ya no quieren llevar dos dispositivos al mismo tiempo».
El precio tampoco es un aliado de estas consolas portátiles. Mientras que la PS Vita la podemos conseguir en pack con juegos desde 169 euros, la Nintendo 3DS se puede conseguir desde 159 euros. Aunque no son unos precios abusivos y ha habido continúas bajadas, es cierto que por esa cantidad podemos tener en nuestras manos un smartphone o tablet que nos permita no solo jugar sino también navegar, chatear e instalar muchas más aplicaciones.
De los pocos datos que se tienen de ventas de Nintendo 3DS se habla de alrededor de 15 millones de unidades vendidas durante 2011. No obstante, en 2012 las ventas caen a 12,7 millones. Lo último que sabemos es que se han vendido 16 millones de juegos en 2013. Unos números que muestran que el entretenimiento tiene tirón en esta plataforma quizás porque muchos consumidores aprovechan que han hecho la inversión para seguir amortizando la compra con otros títulos.
Por su parte, la Sony tampoco ha dado datos oficiales en los últimos tiempos sobre su PS Vita. Las últimas cifras, tres meses después de su lanzamiento, nos hablaban 1,2 millones de consolas portátiles. En 2012, el cómputo total ascendió a 3,1 millones de unidades vendidas. A partir de ahí, poco se sabe de la evolución de ese negocio. Aún así, las últimas declaraciones del responsable de la división PlayStation en Sony UK hablan por si solas:
«Sinceramente, nos esperábamos una ventas más altas para PS Vita. Su mercado es ahora mucho más complicado que cuando diseñamos y producimos la consola. El número de personas que quiere una experiencia basada en PS Vita no es tan grande como el que quieren jugar y moverse».
Viendo el panorama es fácil ver cómo los hábitos y los nuevos dispositivos han dejado a las consolas portátiles en una situación complicada. De hecho, a juzgar por el pesimismo en las palabras de Gara, parece que Sony se podría plantear el dejar de comercializar este dispositivo. Un hecho que confirmaría que el fin de las consolas portátiles no está demasiado lejos.
Pero ¿Realmente el espacio de la consola portátil está tan limitado? ¿Han caído tanto las ventas a favor de otros dispositivos móviles? ¿Por qué los consumidores no apuestan por estos dispositivos? Abrimos la veda de comentarios para vosotros.