Juan José Amor, director de empresas y partners de Microsoft Ibérica establecía el rumbo a seguir:
«Hace un año presentamos la nueva era de Microsoft con Windows 8. Después de los frutos obtenidos en este tiempo, tenemos que seguir innovando en esta nueva era basándonos en dispositivos y servicios cloud».
Junto a Microsoft han estado los fabricantes más familiarizados con la marca como Intel, Acer, Lenovo, Dell, HP o Nokia. También han tenido su espacio los mayoristas entre ellos, Esprinet, GTI, Ingram Micro, MCR y Tech Data. A todos ellos les acompañaban unas 500 compañías del canal de la marca.
Microsoft ha presumido durante esta jornada de tener la oferta más amplia del mercado con soluciones que van desde el catálogo tradicional pasando por soluciones en la nube privada y pública. El objetivo es que la información pueda fluir libremente entre los tres paradigmas y los socios puedan combinarlos.
El canal tiene mucho qué decir en la ejecución de estos objetivos. Con un 95% del negocio realizado a través de los socios, en la Convención de partners de Microsoft, la compañía ha asegurado que seguirá confiando en las empresas para aupar su software. Además, seguirá fomentando la colaboración entre ellos con iniciativas como International Association of Microsoft Channel Partners.
El Microsoft Partner Network sigue siendo el foro desde donde se gestiona la comunidad de más de 6.000 socios de Microsoft. Un lugar que seguirá evolucionando para dar más cobertura formativa, más contenidos y recursos de marketing. Dentro del programa, los incentivos con más de 20 millones de dólares invertidos también son vitales.
Otra de las grandes patas es la financiación de Microsoft. España es tras Australia el país que más ha tirado de este servicio para completar proyectos con tecnología de la casa. Concretamente, en 2012 Microsoft invirtió 60 millones de euros. Una cifra potente pero que, en palabras de Juan José, «debería ser mucho más alta porque todavía muchos socios no conocen esta herramienta».
Y al hablar de canal y nube es lógico pensar en Office 365. La gran apuesta ofimática de Microsoft está dando buenos resultados. Tanto es así que ya son más de 421 socios implicados en la venta de la suite, un 273% más que el año pasado. No obstante, el nuevo modelo de facturación directa impuesto para facilitar la labor del canal, no ha sido acogido como se esperaba.
Windows 8 y la actualización Windows 8.1 junto con todo el universo de aplicaciones y dispositivos son uno de los focos principales de Microsoft. Con ellos quiere dejar atrás antiguos lastres que lleva mucho tiempo queriéndose quitar de encima. Entre ellos, Windows XP que todavía cuenta con algo más del 40% de cuota de mercado en España. A este respecto el responsable de empresas y partners comentaba:
«Todavía hay 2 millones de empresas con equipos con Windows XP. La difícil situación económica hace que algunas posterguen la renovación de hardware. Sin embargo, hay que ser optimista y ver este cambio como una oportunidad para el canal. Una opción de entrar en las compañías y ofrecer un nuevo universo de dispositivos y servicios que las hagan más productivas.»
Respecto a los nuevos dispositivos, el portavoz de los socios Microsoft en España asegura que Surface solo será un OEM más y su foco es Windows 8 y Windows 8.1. Una afirmación que puede tranquilizar al resto de fabricantes después de un año convulso tras la entrada en el mundo de hardware con este tablet.
Junto a Windows XP y los nuevos dispositivos, Microsoft cree que las tablets profesionales son otra oportunidad de negocio abordable por parte de sus socios:
«El año pasado se vendieron en España 3 millones de tablets, la mayoría en el mercado de consumo y unas pocas en la parte alta de las corporaciones. Hay que llegar al grueso de las empresas que no ha integrado las tablets en sus rutinas porque no están sus aplicaciones empresariales. En este sentido, Windows en las diferentes plataformas es el ecosistema perfecto.»
Un estudio realizado por Ipsos MORI para Microsoft demuestra que las pymes españolas quieren cloud. Según el informe, un 62% de las pymes utiliza algún servicio cloud. De hecho, España es el segundo país de Europa con más pequeñas y medianas empresas adaptadas al cloud. Esto, según Juan Jóse, ya es una ventaja competitiva:
«Las pymes ya saben cómo funciona la nube, conocen el modelo de negocio. Ahora solo es necesario dar valor añadido para que las empresas paguen por los servicios cloud que se ofertan».
Y parece que las pymes están dispuestas a invertir en cloud. El 49% de las compañías que utilizan cloud están dispuestas a aumentar el gasto durante los próximos 12 meses. Todo ello porque el 72% considera que la nube mejora la productividad y es más eficaz en los negocios, sobre todo, para aupar el proceso de internacionalización que alguna está llevando a cabo.
Con este panorama es evidente que las pymes consideran que el cloud es una tecnología decisiva para su futuro. Concretamente, el 61% prevé que tenga una importancia crítica. Incluso el 29% se plantea lanzar nuevos productos o servicios alrededor de la nube, pese a los malos tiempos en España.