Con el objetivo de que las corporaciones mejoren en ciberseguridad, la Casa Blanca está trabajando en un proyecto que contempla exenciones de impuestos, rebajas en seguros y otros beneficios fiscales y legales que apuntan a un ahorro de costes empresarial como incentivo.
Se trataría de crear un marco normativo elaborado por el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) y el Instituto Nacional de Estándares y Tecnología (NIST) con la participación de las empresas y la adopción de estas normas voluntariamente para mejorar sus defensas digitales.
Un marco normativo citado por Politico que analiza no sólo los beneficios financieros y de mercado, sino también los legales, incluido la protección contra una posible demanda para las empresas participantes.
Aunque el proyecto está diseñado para convencer a las corporaciones a cargo de infraestructuras críticas, en particular, centrales eléctricas y sistemas de agua, se dirige también a todo tipo de empresas.
A este respecto señalar que en los últimos trimestres se ha observado un importante aumento de ciberataques contra empresas de 250 empleados o menos. El hecho de que muchas no tengan el tipo de seguridad adecuada, o la capacidad para implementarla, los convierte en blanco de los ciberdelincuentes.
Un extremo que quiere superar el gobierno estadounidense con este ‘soborno’ a sus empresas para incentivarlas a aumentar la ciberseguridad.