La anécdota es curiosa cuanto menos. Pongamos en situación. Desde el pasado domingo, la operadora AT&T ha comenzado a vender en Estados Unidos terminales Nokia Lumia 900. En este tiempo, la publicación Cnet ha comprobado que la plantilla de esta empresa prefiere vender iPhones o Android.
Uno de los redactores del medio se fue a una tienda AT&T a interesarse por el último modelo de Nokia lanzado en su país, y estas fueron algunas de las frases que le brindaron los dependientes:
«Windows Phone está bien pero no es un iPhone»
«Para tu primer móvil deberías comprarte un iPhone»
«Cuando te aburras con este -Nokia Lumia 900-, deberías comprarte un Android»
Ramon Llamas, analista senior de IDC hizo la misma prueba. El resultado fue similar, aunque en este caso el vendedor era más fan de Android:
«Hablé con varios vendedores y ninguno fue capaz de decirme cuál era la diferencia entre Windows Phone y el resto de sistemas operativos. Varios me recomendaron teléfonos de Android como el Galaxy Note. Sin embargo, le dije que era fanático de Windows Phone y me dijeron que era una excepción».
Por supuesto, en ambos casos la pregunta es clara ¿tienen la suficiente formación los vendedores de AT&T sobre Windows Phone? En este sentido, Greg Sullivan de Microsoft rápidamente ha salido al encuentro de esta información y ha admitido que los vendedores de AT&T necesitan más educación:
«Hay miles de tiendas y muchos más vendedores autorizados en el país. Educar a todos de la noche a la mañana es complicado pero estamos en el proceso».
Al respecto, Ramon Llamas de IDC ha explicado:
«Ganar el punto de ventas es esencial para el éxito del Nokia Lumia 900. Los dependientes debe saber educar a los potenciales clientes sobre las ventajas de Windows Phone. Ellos deben saber explicar la diferencia entre este sistema y los de la competencia»
Está claro que, tal y como dicen desde IDC, si Nokia y Microsoft quieren que el smartphone de Windows Phone sea un éxito, tendrán que seguir apostando por la formación en el punto de venta. Esencial.