HP vuelve a sorprendernos con la impresora multifunción HP Officejet Pro 8500A. De aspecto imponente y precio comedido -300 euros- este modelo destaca por integrar la tecnología ePrint que ha popularizado HP durante el último año.
Sus prestaciones son espectaculares: hasta 35 páginas minuto (15 segundos la primera copia), posibilidad de dúplex, alimentador de hojas para escaneados múltiples, fax profesional de hasta 100 hojas… Y todo con una facilidad de uso inusitada a través de un panel de control que parece un iPhone.
La OfficeJet Pro protagonista de nuestro test quizá no es tan “cool” como la Lexmark Genesys que analizamos recientemente pero a cambio es más silenciosa, sus cartuchos duran mucho más y el escáner a pesar de ser más lento permite alimentación automática.
Bien embalada -en la caja encontramos todos los componentes, cartuchos y cables, además de la suite de utilidades y la guía de usuario en CD-ROM-, necesitamos menos de cinco minutos para instalarla. Nosotros aconsejamos hacerlo vía WiFi porque así podremos compartirla sin problemas en el hogar o la oficina aunque por supuesto permite el cable USB.
Conectarla es tan simple como detectar la WiFi, poner la contraseña y a trabajar. No tiene mayor complejidad tanto en entornos Mac, PC o mixtos. Por supuesto, también puede funcionar de forma autónoma conectando un dispositivo de almacenamiento al puerto USB o su ranura para tarjetas de memoria. Desde el panel de control podemos de forma intuitiva y táctil elegir la mejor opción para imprimir con garantías.
La verdad es que la tecnología ePrint es mucho más que un barniz publicitario. Lo bueno es que funciona perfectamente y ahorra tiempo: una gozada enviar desde cualquier dispositivo móvil un mail con un adjunto y ver que al minuto el trabajo está en la bandeja de impresión. Para lograr estos resultados hay que seguir los pasos que nos indica HP y darla de alta en el servidor para conseguir una dirección única a la que mandar nuestros trabajos. La hemos probado en forma remota y opera sin problemas.
Como hemos adelantado, ofrece impresión a doble cara de serie, resolución de 4.800 x 1.200 ppp y una velocidad que alcanza las 15 páginas por minuto en blanco y negro y 11 en color con una calidad espectacular. La bandeja de entrada tiene capacidad para 250 hojas con la opción de una segunda.
Quizá el único pero que hemos encontrado a este modelo es la gestión de papel. Y no es que haya lidiado con todo tipo de formatos y calidades -cartulinas, papel fotográfico, especial de tarjetas…- pero de tanto en tanto el alimentador no recepciona bien el papel y avisa de la falta de este. La solución es fácil pero molesta: abrir el compartimento, empujar el papel y cerrar. Eso sí, en honor a la verdad pocos modelos conocemos que no pequen del mismo fallo.
La pantalla táctil es de auténtico lujo. Con un tamaño de 10,9 cm cuenta con unos iconos grandes y claros desde donde se accede a todas las funciones o configuración del dispositivo. También podemos actualizar el firmware, ver cómo vamos de tinta o acceder al módulo de aplicaciones, la mayoría lúdicas. En el terreno de las conexiones, además del wireless, inclue puerto USB, Ethernet, ranuras de memoria, y dos puertos módem RJ-11 para el fax.
En el capítulo más importante, en el de la impresión, la OfficeJet Pro 8500A no defrauda. Como hemos adelantado se “come” todo tipo de papel de hasta 250 gramos y la salida, con una resolución de hasta 4.800 x 1.200 puntos es de una calidad muy razonable. La tecnología utilizada es de inyección térmica y cuenta con cuatro cartuchos de tinta independientes de larga duración. En nuestro caso, por encima de las 1.000 páginas, aunque eso sí con predominio del negro. Para ello recomendamos utilizar el cartucho HP 940XL Officejet que a pesar de su alto coste, 31 euros, da un rendimiento de más del doble que uno normal que cuesta 24 euros.
Además imprime casi en silencio. Sólo se oye el ruido mecánico de arrastrar el papel. Y vibra bastante menos que otros modelos de inyección debido, entre otros factores, a sus casi 13 kilos de peso.
Como escáner también da la talla. De tipo plano y con una resolución óptica de 4.800 ppp es rápido y cuenta con el valor añadido del alimentador automático de documentos incluido de serie. Como copiadora también permite virguerías como aumentar o reducir el tamaño del documento entre un 25% y un 400% y hacer hasta 99 copias a razón de 35 cpm en calidad borrador.
Por supuesto, cumple todos los estándares actuales de ahorro de energía. Su consumo es de 28 vatios “trabajando”, 6,3 vatios en espera y 2,5 vatios en suspensión.
