La versión RTM del esperado sistema operativo para móviles de Microsoft está lista para ser distribuida a socios, fabricantes y desarrolladores de la compañía. Asimismo, la RTM marca el fin del trabajo de ingeniería interna y el comienzo de la aventura de la plataforma móvil más ambiciosa en la historia de Microsoft. Las cifras que rodean al sistema hablan por sí solas de esta gran apuesta.
10.000 dispositivos ejecutando diariamente pruebas automáticas, medio millón de horas de actividad en pruebas de uso, tres millones y medio de horas de pruebas de esfuerzo, ocho millones y medio de horas de pruebas automatizadas y miles de probadores externos e internos (con entrega al personal de un terminal) son algunos de los datos ofrecidos por la compañía en el trabajo de Windows Phone 7 cuando se anuncia el envío de la RTM a socios y fabricantes.
Unos datos que se unen a los 1.000 ingenieros, diseñadores y desarrolladores de Microsoft que han participado en la creación del sistema o los 1.000 millones de dólares que se estiman Microsoft invertirá en la campaña de marketing para el lanzamiento y en ingeniería no-recurrente’, pagos para ayudar a compensar costes entre los fabricantes de terminales.
Sobre la RTM comentar que además de la habitual corrección de bugs y ajustes finales sobre las beta se han añadido algunas características como la opción de filtrar contactos en Facebook o actualizaciones de la interfaz incluyendo una nueva búsqueda en la lista de contactos. Opciones menores ya que como tuvimos ocasión de comprobar en directo con un prototipo ya en junio, nos encontrábamos con un terminal perfectamente funcional.
Tras la RTM, llegan las pruebas de los fabricantes y la integración en los terminales para un lanzamiento que podría llegar tan pronto como en octubre aunque no tenemos confirmación de tal extremo. Independientemente de la cuota de mercado que pueda recuperar Microsoft con WP7 no hay duda que el sistema promete y que contará con terminales del más alto nivel hardware. Más competencia en un sector en plena ebullición en la tecnología actual.