Medion comercializa el ordenador junto a un discreto juego de teclado y ratón, discos con Windows 7 Home Premium (versiones de 32 y 64 bits) y un completo manual de usuario en perfecto castellano. Viene totalmente ensamblado y con el sistema operativo instalado, de tal forma que el usuario sólo tiene que enchufar los periféricos, el cable de alimentación y encenderlo para empezar a disfrutarlo.
El ordenador está montado sobre una caja propietaria realizada en acero con detalles en plástico de color rojo vivo. De serie incorpora 4 bahías de 5,25 pulgadas, tres de ellas ocupadas por una regrabadora de DVD y dos prácticos racks para discos duros de 3,5 pulgadas fácilmente extraibles. En la parte frontal Medion ha instalado lectores de tarjetas para Memory Stick y SD/MMC, un par de puertos USB 2.0 y entradas y salidas de audio.
Los racks ya vienen montados y se extraen de manera sencilla.
En un lateral del chasis veremos una salida de aire donde se ha instalado un ventilador de 12 mm. encargado de extraer el aire caliente del interior de la caja. En la zona posterior encontarmos un completo surtido de puertos (detallados en la ficha técnica adjunta) más que suficientes para el usuario medio.
Cuando abrimos la caja (operación muy sencilla y que sólo requiere aflojar un par de tornillos) encontraremos unaplaca base MSI MS7522 gobernada por el chiset X58 de Intel, un procesador Intel Core i7 920 (que ya analizamos con detalle en el laboratorio), 12 Gbytes de memoria RAM (en seis módulos de 2 Gbytes cada uno) y un disco duro SATA de 1 terabyte.
De los gráficos se encarga una tarjeta dedicada NVIDIA GeForce GT 230, disponible sólo para OEM y con soporte nativo para DirectX 10.1. Nos ha resultado extraño no encontrar una solución gráfica más potente(se ubica en la gama media-baja de NVIDIA), teniendo en cuenta el precio final del equipo y el nicho de público al que va dirigido.
El rendimiento del equipo va en consonancia con su carga tecnológica: el potente procesador y la ingente cantidad de RAM incorporada consiguen muy buenas marcas en nuestras pruebas de rendimiento sintético. En uso real el ordenador maneja las aplicaciones habituales con total fluidez y puede afrontar escenarios multitarea sin ningún problema. También es una máquina fantástica para edición fotográfica, montaje de vídeo, software matemático, etc.
No podemos decir lo mismo de la gráfica, suficiente para ejecutar aplicaciones poco exigentes con el cálculo 3D pero que obligará a los más jugones a reducir el nivel de detalle en los títulos más punteros si no quieren perder frames. Un sacrificio excesivo, teniendo en cuenta los más de 1.000 euros que hay que desembolsar para hacerse con el equipo. Aunque resolver este tema es sencillo y no demasiado caro (por unos 150 euros ya encontramos soluciones gráficas decentes) sorprende que no se haya cuidado más un punto clave de la configruación.
Sorprende encontrar puertos PS/2 a estas alturas.
Conclusiones
El equipo de Medion es la clásica solución sobremesa «lista para llevar» tan popular en grandes superficies dedicadas a la electrónica de consumo. El Medion PC 7296 presenta una configuración potente, aunque su modesta solución dedicada de NVIDIA no esta a la altura del resto del equipo y penaliza en nuestra valoración final.
En definitiva, una solución interesante para usuarios que busquen un ordenador completo, garantizado por un fabricante solvente, y que rendimiento más que suficiente para ejecutar con soltura hasta las aplicaciones más pesadas sin problemas. Los aficionados a los videojuegos que se decidan por él deben tener claro que más pronto que tarde necesitarán actualizar la gráfica para disfrutar en condiciones de los últimos títulos del mercado.
