El pasado fin de semana nuestros compañeros de MuyComputerPRO nos informaron sobre la existencia de una partida de 300 micros Intel Core i7-920 falsificados en el inventario del minorista estadounidense de electrónica, Newegg, algunos de los cuales fueron enviados a los compradores.
El minorista explicó que “uno de sus socios había enviado por error un pequeño número de cajas de demostración en vez de unidades funcionales”. Además indicó que su equipo de servicio al cliente había comenzado a contactar con los clientes afectados.
Unas explicaciones que no convencieron a nadie y más cuando se tuvo conocimiento que Newegg había indicado a distintos sitios web que desistieran de publicar esta noticia. Ahora, la confirmación de las falsificaciones y la investigación de Intel contradice la información del minorista cuando habla de “productos falsificados” y no “de unidades de demostración” como indicaron.
Obviamente, no creemos que Newegg pretendiera colar el producto con tan burdo paquete, compuesto por un disipador de arcilla y como procesador una simple chapa metálica, pero sí tendría que explicar el intento de tapar el asunto, la desinformación y la falta de control para vender y enviar productos falsificados.