El precio de la memoria gráfica ha subido de los 6,50 dólares hasta los 8,50 dólares, un incremento del 30,8% en lo que llevamos de agosto.
Este encarecimiento no se ha producido por una escasez de dicho componente y tampoco se debe a una afectación derivada de la alta demanda de tarjetas gráficas para minado de criptodivisas, sino que ha sido provocada por una reasignación productiva originada por la escasez de memoria RAM.
Gigantes como Samsung y SK Hynix han modificado parte de su capacidad productiva de memoria gráfica para fabricar memoria RAM para servidores y terminales móviles, un movimiento con el que intentan paliar la escasez de DRAM que vive el mercado.
Es un cambio necesario pero tendrá consecuencias importantes en el sector. Ya hemos visto una primera subida de precios, pero las principales fuentes presentes en la cadena productiva de Taiwán confirman que los precios de dicho componente seguirán creciendo durante el mes de septiembre.
La memoria gráfica es un componente en alza debido a la alta demanda del mismo para la fabricación de tarjetas gráficas, un elemento esencial en portátiles y equipos gaming. Dicho mercado está creciendo de forma sostenida, así que una escasez importante podría acabar elevando los precios de una manera considerable.
Samsung y SK Hynix suministran el 55% y el 35% del total de memoria gráfica, mientras que Micron representa el 10% del total, así que podemos hacernos una idea del peso que los cambios de esos dos gigantes pueden tener en el mercado.
Se espera que el gigante surcoreano tome medidas para incrementar su capacidad productiva antes de terminar el año, pero las ventas del cuarto trimestre de 2017 se verán resentidas igualmente ya que los suministros provienen directamente de los envíos realizados durante el tercer trimestre.