La memoria NAND Flash es uno de los componentes tecnológicos que más polémica ha generado durante los últimos trimestres y es perfectamente comprensible, ya que ha experimentado una subida de precio gradual muy pronunciada y actualmente se encuentra en una situación bastante convulsa.
Khein Seng Pua, ejecutivo de Phison Electronics, ha comentado recientemente que los precios de la memoria NAND Flash se estabilizarán un poco durante el segundo trimestre de este mismo año y que incluso podría producirse una bajada de los mismos, pero esto no quiere decir que la situación vaya a mantenerse así durante todo el año, de hecho ocurrirá más bien todo lo contrario.
Tras esa aparente calma los precios volverán a entrar en una espiral de subida gradual a partir del tercer trimestre de este año, un escenario complicado que no parece que vaya a cambiar ya hasta algún punto de 2018.
Esto seguirá teniendo consecuencias importantes en componentes de consumo tan populares como los discos SSD, las memorias USB y en cualquier componente, dispositivo o equipo que utilice memoria NAND Flash.
La demanda sigue alta y la transición de las memorias NAND Flash 2D a las 3D ha complicado todavía más la situación, generando una escasez que se ha dejado notar incluso con la llegada de nuevos productos.
El mejor ejemplo lo tenemos en los SSDs de 96 GB que se están promocionando en China como alternativa a los modelos de 128 GB para suplir la falta de suministro que se está viviendo en el canal.
Recordamos que esta situación también ha afectado negativamente a los precios de la memoria DRAM, que se han incrementado considerablemente por la decisión de algunos fabricantes de adaptar fábricas de dicho componente y utilizarlas para producir chips de memoria NAND Flash.
